Las medidas saludables para mejorar el flujo venoso pasan por usar las medias compresivas, hacer ejercicio, controlar el peso, evitar el estreñimiento, rehuir los períodos prologados de pie sin deambular, y acudir al médico para tratar de reducir su avance.
Activar la circulación: Papel del ejercicio la insuficiencia venosa
El ejercicio es una de las mejores medidas para la prevención y el tratamiento de la insuficiencia venosa ya que favorece el flujo venoso reduciendo con ello el estasis sanguíneo y falta de oxígeno en la pared de la vena que forman parte de los desencadenantes del proceso inflamatorio en esta enfermedad. Su acción sobre las bombas musculares dependerá de la capacidad del paciente para movilizarse y del rango de movimiento que alcance con sus articulaciones.
Las medias compresivas
El uso de medias compresivas es uno de los pilares fundamentales del tratamiento de la enfermedad venosa, su grado y nivel de compresión deben ser indicados por el médico especialista en enfermedades vasculares quien está en deber de informar al paciente de cómo debe colocárselas.
Hay muchos tipos de medias para varices y su elección dependerá del nivel de la lesión venosa y del grado de enfermedad que tenga el paciente, así como de sus lesiones concurrentes.
Durante la época de calor suelen aumentar los síntomas de las varices por dilatación vascular, es importante en ese momento mantener el uso de las medias, es recomendable en ese caso consultar al médico si aprueba el uso de las medias cuya altura llegue hasta por debajo de la rodilla (tipo calcetín) y que hacen más viable seguir el tratamiento durante períodos de elevadas temperaturas.
Los tratamientos invasivos
La cirugía y la esclerosis de las venas dañadas son tratamientos invasivos que se emplean para las varices. Su éxito o fracaso dependerán de que se haya hecho un buen diagnóstico considerando las tres causas de la insuficiencia venosa (reflujo valvular, obstrucción de las venas o falla de bomba muscular), entendiendo que muchas veces suelen cursar combinadas y el saltarse el tratamiento de alguna de ellas dificulta la mejoría y favorece la recurrencia.
La extracción o ablación quirúrgica de una vena – ya sea por cirugía convencional, láser o radiofrecuencia – no garantiza la curación del paciente, si no se resuelve el origen del problema hemodinámico al tiempo puede reaparecer pues la sangre buscará avanzar por otros caminos de venas de paredes igualmente afectadas, por ello es recomendable en estos casos la consulta con médicos especialistas en enfermedades vasculares en lugar de otros sin estas credenciales.
Fármacos venotónicos
Algunos fármacos han demostrado eficacia en la mejoría de los síntomas de las personas con insuficiencia venosa. No obstante, en los casos de úlceras sólo algunos pocos medicamentos venotónicos han mostrado un efecto limitado que se debe acompañar de otras medidas terapéuticas para lograr su éxito.
Educar al paciente y su familia
Es muy importante hacer prevención en los hijos de pacientes con varices. Esta enfermedad es de alta heredabilidad por lo que hay que dedicar tiempo a instruir al paciente y a su familia sobre cómo prevenir o retardar su aparición con el uso de medias compresivas y evitando los factores de riesgo.
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