Siempre hablamos de las bondades de las medias de compresión, tanto para el tratamiento de la insuficiencia venosa crónica como en la prevención de trombosis venosa, por ello nos pareció muy apropiado hablar de nuestra experiencia con pacientes en quienes el uso de las medias fue insatisfactorio y hasta contraproducente por la causa más corregible de todas… unas medias mal puestas.
Las medias de compresión por su naturaleza elástica ejercen más presión mientras mayor cantidad del material se agrupe, por ello siempre se recomienda al colocar las medias ir estirándolas mientras se sube y repasar al final de colocadas si no se han hecho pliegues o zonas de material amontonado mal estirado. El amontonamiento o pliegues de las medias pueden actuar focalmente comprimiendo los tejidos por debajo de él como una especie de torniquete, ejerciendo una presión mucho mayor que la media que está más distal que ella, hacia los pies.
Síndrome del Torniquete
Quinn, en 1971, describió el «síndrome del torniquete», entidad clínica poco conocida que afecta a zonas distales como dedos de pies o manos debida a estrangulación de apéndices corporales que en ocasiones era causada por filamentos que rodearon de forma accidental la zona previa a la afectada limitando la circulación sanguínea hasta estos.
Las medias de compresión son diseñadas con una discreta forma de embudo (diámetro ascendente desde la parte inferior a la superior) que junto a la confección de su tejido elástico llevarían una perfecta adaptabilidad anatómica con ajuste preciso de modo de ejercer una compresión decreciente, impulsando la sangre hacia el corazón y evitando que la media caiga por falta de sujeción, no debiendo causar la constricción de la piel y sus venas subyacentes por la formación de pliegues.
El correcto diseño de las medias elásticas es el que origina la compresión graduada decreciente, lo que favorece el retorno venoso por un gradiente de presión, lo contrario llevando a compresión focal excesiva, como un torniquete, simplemente estancaría el flujo venoso haciéndolo más lento y originando el efecto opuesto al que queremos lograr, un problema si lo que se pretendía era un efecto antitrombótico puesto que podría lograrse lo contrario.
Cuándo actúan las medias de compresión como torniquete
Este problema con el uso de las medias compresivas lo hemos visto en nuestra práctica médica en los siguientes casos:
- En modelos de medias de compresión baratas con bandas de sujeción mal diseñadas
- En pacientes dependientes a quienes les cuesta valerse por si mismos, algunos con dificultades para expresarse, y a quienes otras personas menos conocedoras les ponen las medias de modo deficiente.
- En ancianos.
- En pacientes poco cuidadosos, es lo menos frecuente
Forma de evitar el efecto torniquete o los pliegues en las medias
Es más simple de lo que se piensa.
- Lo primero es subir las medias estirándolas suave pero firmemente y fijarse que no se hagan pliegues ni dobleces donde se amontone la media. Suba las medias las veces que sea necesario hasta que no haya pliegues ni arrugas.
- Sí las medias se pliegan no descarte comprar un cinturón, ligas o liguero para medias de compresión.
- Observe bien si las medias se pliegan exageradamente detrás de la rodilla. Si el paciente usa medias compresivas hasta la rodilla, piense en cambiarlas por unas más altas, medias hasta el muslo, que tienen menos tendencia a doblarse detrás de la rodilla.
- Note que no haya dobleces alrededor del tobillo.
- Si es el familiar de un paciente dependiente observe que no se le comprima con la media a modo de cincho la piel que se encuentra más arriba que la de abajo y si hay personal encargado del paciente que éste vele por su colocación adecuada.
- Si es una persona con limitaciones físicas puede ayudarse de un aparato de colocación de medias compresivas.
- Compre medias compresivas de buena calidad sin bandas superiores estrangulantes. En caso de medias hasta el muslo existen casas de medias que fabrican modelos con bandas anchas que cuentan con elementos adherentes de silicona que actúan como antideslizantes en todo el perímetro de la pierna facilitando la sujeción de la media a la piel, evitando así su deslizamiento sin estrangular.
- Para medias antitrombóticas también existen algunos modelos especializados que traen en su diseño una zona anti-torniquete localizada en la cara interna del muslo (zona inguinal) conformada por un pliegue en forma de V que otorga mayor seguridad al paciente evitando la posibilidad de ejercer una presión excesiva o efecto torniquete en esta región.
- Use medias con talón marcado. El talón es muy importante puesto que sirve de apoyo y punto de ajuste inicial para facilitar el deslizamiento y adecuada colocación de la media hacia el resto de la pierna reduciendo la formación de pliegues.
En el caso de pacientes encamados que requieren usar medias antitrombóticas o anti-embolismo es de hacer notar que si bien estas suelen disponen de un orificio de inspección debajo de la zona de los dedos del pie para comprobar visualmente el estado de la piel, color, calor y la circulación, este orificio no es suficiente para ver los cambios venosos, sirven más para ver cambios en la piel de la extremidad que sean de origen arterial u otras lesiones, sin necesidad de retirar las medias.